La cruz de la victoria, es multicolor…

La historia de las diversidades nos anteceden… siempre existió la identidad

La humanidad desvirtuada… la negación del otro, nos llevó a reprimir la identidad provocando dolor… muerte

A lo largo de la historia las identidades de géneros han sido negadas, bajo imposición cultural, basados en puritanismos hipócritas, atribuyéndole argumento a un Dios falso, la única y solemne existencia del binarismo. Dicha mentira es evidente si analizamos la historia de la homosexualidad, por lo que podemos afirmar que en nuestro devenir no negamos solo al género femenino, sino que primero se negó u reprimió la cuestión de los hombres (varones), otro motivo más para repensarnos como sociedad, ya que en cuanto a represiones no existen géneros, nos reprimimos mutuamente, la represión y la imposición existen culturalmente, lo único que cambia es la orientación, en momentos históricos o contextuales se va orientar hacia un género en particular, mientras que en otras ocasiones se orienta hacia otro, o directamente hacia todos en una total desvirtuación de lo humano.

El Dios que nos impusieron todo poderoso, que vendría a salvar a la humanidad, que con su cuerpo y sangre nos justificó, pero la «Gran ramera» no hace mucho que en nombre de un falso Cristo, avaló el pecado, violando el mandamiento número 1 «No matarás», matando no solo los cuerpos humanos, sino las identidades humanas, dando justificación a la represión, definiendo diferencias. Por lo que vemos la gran defensora de Dios, lanzó hipócrita y descaradamente la primer piedra, pero esta le rebotó en la cara, ya que violó todas las normas que defendía, y se creó para sí un nuevo Dios, » El Dios de la represión» la represión de lo no normativo, la falsa solemnidad, la represión violenta de los cuerpos libres, hasta la represión del Espíritu. Y qué es el Espíritu ?sino la libertad, qué es Dios ? sino amor, y qué es el amor ? sino la perfecta equidad dentro de las diferencias.

La cruz de la victoria es de Cristo Jesús, pero esa cruz perdió de tal manera su significado, que hoy hacemos la señal de la cruz como símbolo de crucificción, y no como símbolo de victoria, esa cruz no se perdió, solo cambió de color, hoy es multicolor, como fue en algún momento en el que el amor, la compasión, y igualdad eran mandato divino. Hoy la cruz de la victoria se manifiesta y la podemos percibir por sus colores, y es la cruz de la victoria… porque venció represión, el odio, la persecución y la muerte… Venció el verdadero pecado.